El comienzo del año escolar es sinónimo de ansiedad, alegría, amigos, nuevas maestras, etc., pero también envuelve enfermarse a menudo, cargar bultos, estar sentado por mucho tiempo, mala postura y hacer actividades que pueden envolver caídas y accidentes. Por eso es muy importante llevar a su niño al quiropráctico, para evitar y corregir el daño de algunas actividades que se hacen en el diario vivir.
- Enfermarse a menudo – el sistema inmunológico está débil. Los ajustes quiroprácticos fortalecen este sistema
- Mala postura y estar sentado mucho tiempo – puede causar escoliosis, que es desviación en la columna. Se puede corregir con la quiropráctica si se detecta a tiempo.
- Caídas y accidentes – jugando algún deporte o en el recreo de la escuela, pueden lastimarse. Un ajuste a tiempo previene problemas en el futuro.
Los niños que visitan al quiropráctico gozan de mejor salud. ¡Visítanos!